MADRID, 9 diciembre.
Antonio Banderas busca, junto a María Casado, crear "un universo propio" en "Escena en Blanco & Negro", un programa musical, que estrenan en Amazon el 15 de diciembre, en el que aúnan "libertad creativa, frescura y música en directo" para dar vida, cuenta a Efe, a un proyecto con una atmósfera "única".
La música se ha convertido en una rama del arte de la que el actor malagueño Antonio Banderas parece no querer bajarse. Dejaba muestras de ello con la adaptación del musical de Broadway "A Chorus Line" y es ahora, en unos meses difíciles para el desarrollo de cualquier tipo de proyecto, cuando se embarca en una nueva aventura que aúna música y televisión: "Escena en Blanco & Negro".
El intérprete creó hace unos meses SohoTV, una productora con la que deseaba desarrollar programas de televisión "diferentes", con "valor añadido" y en los que se buscara la "excelencia" y la "verdad artística". El primer paso para abrirse camino en el mundo de la televisión fue fichar a la periodista María Casado, quien tras dejar Televisión Española se convertiría en la responsable de dicha productora, ligada al Teatro del Soho de Málaga.
Con "decisión" y una "propuesta clara", Banderas y Casado ponen en marcha "Escena en Blanco & Negro", un programa musical que Amazon Prime Video estrenará el próximo 15 de diciembre que permitirá al espectador acercarse a diferentes artistas españoles a través de una entrevista con Casado, que simula una sencilla charla entre amigos, junto a una actuación en directo.
"Es una apuesta por la cultura, por el arte", explica Banderas en una entrevista con Efe en la que deja claro que su incursión en el mundo de la televisión no supone querer "dar lecciones" a otros sino ofrecer "programas que sumen" y den valor a dicha industria.
"Nosotros nacemos con esa ideología televisiva, con un respeto absoluto a lo que cada uno hace en su casa. No pretendo subirme por encima de nadie ni dar lecciones de nada porque hemos de reconocer el nacer con una cierta humildad", desarrolla el actor.
"Eso es lo que tienes que hacer cuando das pasos sobre un territorio nuevo, pero al mismo tiempo con fuerza y con decisión y con una propuesta clara", continúa. Una propuesta que se basa en unos parámetros "muy claros" de los que, como dice él, no se querían bajar.
"Este proyecto es independencia, libertad creativa, frescura, y música totalmente en directo, donde no se ha grabado nada", dice, "eso le da un carácter muy único. Es algo único que ha pasado aquí y que no se volverá a repetir".
En este ambiente tan "cercano e íntimo" conoceremos a los artistas españoles Pablo Alborán, Rozalén, Pablo López, Pasión Vega, David Bisbal y Vanesa Martín, quienes protagonizarán los seis primeros episodios de la temporada, a los que se sumará lo que Banderas llama "bonus track", dedicado al propio actor.
"Surgen pequeños milagros porque ellos se sentían en un ambiente de confianza donde se dejaban ir", relata el malagueño, que será el encargado de abrir cada episodio con un reflexivo monólogo sobre el carácter esencial de las artes, la música o el teatro y de cerrarlo con un epílogo sobre el cantante protagonista del capítulo.
En este "artefacto televisivo" de siete episodios, como lo define Banderas, el actor tenía claro que había un mensaje "esencial" sobre el que siempre iba a reflexionar: "Cada uno habla de lo suyo, pero la idea es que esenciales somos todos, esa es la verdad final de este programa".
Un proyecto en el que han trabajado "en un ambiente de libertad absoluta" sin "ningún tipo de censura o intención de reconducir" por parte de Amazon y con dos factores fundamentales para el actor: María Casado y el uso del blanco y negro.
"El ingreso de María al equipo resuelve muchos problemas. Comprobar, desde la primera grabación, que tenía a una profesional del periodismo y de la televisión que conoce muy bien el medio nos daba a todos muchísima confianza", indica el actor.
Finalmente, Banderas habla de la importancia y la fuerza del blanco y negro, utilizado tanto en el título como en la propia pieza audiovisual: "Ya me ocurría con algunas películas de Woody Allen, me ocurrió también con 'La lista de Schindler'. El blanco y negro me concentra mucho en la historia y en la narrativa, me concentra mucho en el sujeto".
Junto a ello, reconoce que dicha decisión deriva de "un aspecto romántico personal": "Yo la televisión que empiezo a ver, cuando era un niño, era en blanco y negro. En los programas musicales de aquella época el blanco y negro establecía una distancia romántica".
"Es tratar de recuperar un tiempo que no existe, un tiempo perdido, crear un universo propio, nuestro, que pertenece a este lugar", concluye el actor.