Turquía registró este miércoles un nuevo máximo de muertes diarias por covid-19, con 168 fallecidos en las últimas 24 horas, informó el ministro de Salud, Fahrettin Koca, en un discurso transmitido en directo por la cadena CNNTürk.
Además, las autoridades sanitarias turcas registraron entre el martes y miércoles 28.351 nuevos contagios con el coronavirus, mientras que el número total de fallecidos ha alcanzado 12.840, un número relativamente bajo teniendo en cuenta que el país eurasiático tiene unos 80 millones de habitantes.
El gobierno turco volvió hoy a hacer público el número total de contagios tras llevar varios meses dando a conocer únicamente el pacientes sintomáticos registrados cada día, cifra que en la última semana subió de 4,000 a 7,000 personas, y que no incluye a positivos asintomáticos.
Con más de 28,000 nuevos casos en 24 horas, Turquía se sitúa así entre los países con más contagios certificados, por delante de Italia, aunque la cifra de muertos sigue ubicándose muy por debajo de la mayoría de los países europeos.
Según los datos del ministerio, un 3,4% de los pacientes ha desarrollado neumonía y las unidades de cuidados intensivos están al 71 % de su capacidad.
De empeorar la situación, las autoridades podría imponer nuevas restricciones, señaló Koca, aunque de momento se mantiene un toque de queda solo por la noche del fin de semana y el cierre al público de restaurantes y cafeterías, salvo servicio a domicilio,.
Koca confirmó que Turquía ha firmado un contrato con la empresa china Sinovac para comprar 50 millones de dosis de una vacuna que se entregarán en los próximos tres meses.
La primera remesa, de 10 millones de dosis, llegará muy pronto y las vacunaciones podrán empezar el 11 de diciembre, de forma gratuita para los grupos de riesgo y con un precio máximo fijado por el Gobierno para los demás, anunció el ministro turco.
Además, se comprará un millón de dosis a Alemania y se prevé tener disponible a partir de abril una vacuna de desarrollo turco que ya ha entrado en la fase de ensayo con humanos, agregó Koca.