Sudán rechazó participar en una reunión con Egipto y Etiopía para buscar un acuerdo sobre la gestión de la presa que está construyendo Adís Adeba en el Nilo, convocada por Sudáfrica como presidente de la Unión Africana (UA), por considerar que el actual sistema de negociación no sirve.
El Ministro de Riego y Recursos Hídricos sudanés, Yaser Abás, quien había sido invitado a esta reunión virtual junto a sus dos homólogos de Egipto y Etiopía, anunció su decisión en un comunicado en el que, sin embargo confirmó, el compromiso de su país con el proceso de negociación bajo los auspicios de la Unión Africana.
Abás reveló que había enviado una carta a su colega etíope, Seleshi Bekele, reiterándole su propuesta de “otorgar un mayor papel a los expertos de la Unión Africana para facilitar la negociación".
Etiopía lleva tiempo pidiendo este mayor protagonismo para los especialistas, ya que considera que, con el sistema actual, que no los tiene en cuenta, las negociaciones no van a llegar a buen puerto, aunque esta es la primera vez que rechaza participar en una reunión convocada por la Unión Africana.
El pasado jueves, tras participar en uno de estos encuentros, Abás ya había criticado que la actual metodología previa había llevado a un "callejón sin salida" y que el diálogo "no continuará de forma indefinida y es inútil la solicitud de la UA de extender las negociaciones por 10 días".
Egipto, Etiopía y Sudán llevan implicados desde hace años en un complicado proceso de negociación por el llenado de la denominada Gran Presa del Renacimiento Etíope, pero el proyecto mantiene enfrentados especialmente a los dos primeros países debido al potencial impacto de la gigantesca infraestructura en el caudal del Nilo.
El proyecto se inició en 2011 y Egipto lo considera una "amenaza" a su seguridad nacional, ya que depende del Nilo para aproximadamente el 97 % de su riego y agua potable.
Etiopía, por su parte, considera la presa estratégica para su desarrollo, tanto en términos de irrigación para su agricultura como en cuanto a la capacidad para producir electricidad, que podrá incluso exportar.