El programa nuclear iraní vuelve a causar tensiones entre Irán, Estados Unidos y el OIEA -la agencia nuclear de la ONU-, que exigió este miércoles "respuestas creíbles" de Teherán para explicar dudas sobre el origen de partículas de material fisible no declarado en la República Islámica.
El director general del Organismo Internacional de Energía Atómica (OIEA), Rafael Grossi, señaló ante la prensa en Viena que "Irán debe ofrecer información que sea técnicamente creíble".
"Esto no es un ejercicio académico. Nos tienen que explicar por qué encontramos lo que encontramos. Sus explicaciones no han sido satisfactorias", señaló el director general durante un receso de una reunión de la Junta de Gobernadores del OIEA, que se celebra esta semana en la capital austríaca.
"De lo contrario tenemos que preocuparnos sobre el contenido y el alcance de lo que nos cuentan (los iraníes)", advirtió Grossi.
El antiguo diplomático argentino hacía referencia a unas partículas de uranio de origen antropogénico encontradas en 2019 en un sitio del que Irán no ha informado como espacio de experimentos atómicos.
La delegación de EU criticó hoy en el pleno de la Junta como "absolutamente inaceptable" que Irán no haya resuelto en casi dos años el origen de estas trazas fisibles.