Los palestinos estarían dispuestos a reiniciar negociaciones de paz con Israel, suspendidas desde 2014, si Estados Unidos, bajo el presidente electo Joe Biden, renuncia al plan de paz de la Administración Trump e impulsa un diálogo "basado en la ley internacional", dijo hoy un portavoz palestino.
"El liderazgo palestino está preparado para volver a las negociaciones, en base a la legislación internacional o desde el punto donde pararon la última vez, o en base al compromiso israelí con los acuerdos previos firmados", declaró Nabil Abu Rudeinah, portavoz del presidente palestino, Mahmud Abás, según la agencia oficial palestina Wafa.
Las declaraciones siguen a un comentario hecho ayer por el ministro de Defensa israelí, Beny Gantz, que señaló en el Parlamento (Knéset), durante un debate para aprobar el acuerdo de establecimiento de relaciones diplomáticas con Baréin, que los palestinos "deben dejarse de excusas y volver a la mesa de negociaciones" para encontrar una solución al conflicto.
El liderazgo palestino rechazó el tratado de normalización con Baréin, como lo hiciera con el de Emiratos Árabes Unidos (EAU), impulsados por el Gobierno de Donald Trump, por reconocer a Israel antes de la creación de un Estado palestino independiente.
"No se logrará la paz mientras Estados Unidos" e Israel "no reconozcan el derecho del pueblo palestino a establecer un Estado independiente" en las demarcación de 1967, cuando comenzó la ocupación israelí de los territorios palestinos vigente hasta hoy, declaró el presidente Mahmud Abás tras la firma de los conocidos como Acuerdos de Abraham en la Casa Blanca el pasado 15 de septiembre.
La iniciativa de plan de Trump, presentada en enero, modificó el marco de negociación vigente hasta ahora -los Acuerdos de Oslo (1993-95)- al abrir la puerta a la anexión parcial de Cisjordania y relegar la capital palestina a los suburbios de Jerusalén, sin la emblemática Ciudad Vieja, en territorio ocupado y anexionado por Israel.
Los palestinos rechazaron el plan antes de su presentación al descartar a EE.UU. como único interlocutor cuando Trump reconoció Jerusalén como capital de Israel en 2017 y un año más tarde trasladó su embajada allí desde Tel Aviv, además de cerrar la representación en Washington de la Organización para la Liberación de Palestina (OLP).
Con la victoria del demócrata Joe Biden en las elecciones del 3 de noviembre, Abás exprexó su deseo de "mejorar las relaciones" con Estados Unidos, seriamente dañadas durante la presidencia de Trump.