Alain Cocq, el francés que sufre una enfermedad incurable y había iniciado un segundo intento para dejarse morir sin comer y sin tratamiento médico, renunció este viernes debido a los sufrimientos que padecía.
"Ha parado. Los sufrimientos eran demasiado insoportables", señaló a Efe el presidente de la Asociación por el Derecho a Morir Dignamente (ADMD), Jean Luc Romero-Michel, quien recibió un mensaje del enfermo.
Cocq, de 57 años, vivió la misma experiencia que cuando inició su primer intento, el 4 septiembre pasado, para dejarse morir al dejar de comer, de beber y de recibir tratamiento médico, excepto para combatir los fuertes dolores que padece.
Sin embargo, cinco días después abandonó su intento, según Romero-Michel porque no se respetó su deseo de que no se le medicara contra el dolor.
Este hombre sufre desde hace 34 años una enfermedad incurable que le mantiene postrado en una cama medicalizada, a la que hoy volvió tras una breve hospitalización en la que, de nuevo, no volvió a conseguir su objetivo de ser puesto en una sedación profunda.
La primera vez intentó retransmitir el proceso en directo a través de la red social Facebook, pero la red social estadounidense le bloqueó la difusión alegando que aunque respetaba su decisión de "querer llamar la atención sobre una cuestión compleja", sus reglas "no permiten mostrar tentativas de suicidio".
Francia no permite la eutanasia y en los últimos años ha vivido varios casos sonados de pacientes incurables y con elevado nivel de sufrimiento que pedían a la clase político un cambio de la legislación, aunque por ahora sin éxito.