Nueva educación
Son varios los aspectos a tomar en cuenta en la “nueva educación” en la situación en la que estamos inmersos todos. Debemos recordar que tenemos una marcada desigualdad en cuanto al acceso al conocimiento impartido por las autoridades educativas, mientras quienes tienen un mayor ingreso se pueden dar el lujo de utilizar una computadora, tableta o teléfono con acceso a internet para tomar clases virtuales, una gran parte lo hace a través de la televisión y en folletos escritos que las autoridades han distribuido entre la población estudiantil. Pero nos concentraremos en quienes tienen acceso a la educación en línea y los aprendizajes que está dejando en las nuevas generaciones, principalmente mencionamos algunas de las ventajas que son evidentes, pero que probablemente no estamos viendo.
Hace no muchos años, utilizar una computadora requería de conocimientos técnicos y cierto nivel de aprendizaje, ya sea por medio de cursos o para quienes trabajan por medio de capacitación en su empresa. El uso de la computadora para niños se limitaba a ciertos juegos o consumo de contenido (películas, música) sin que pasara de ahí. Si lo contrastamos con estos últimos meses, donde es obligado ahora tomar las clases por videollamadas con los profesores, donde el alumno tiene que estar atento al uso de una herramienta de audio, video y además entregar tareas en documentos electrónicos, estará surgiendo una nueva generación con bases tecnológicas que no existían, o de manera aislada. Muchos alumnos de educación básica de ahora son capaces por un lado de comunicarse visualmente con sus compañeros y profesores, de abrir y crear documentos en línea, de enviar tareas por mensajería o correo electrónico. Hay muchas personas en edad adulta que no lo han hecho nunca o por lo menos de manera fluida.
También es cierto que el aprendizaje en línea tiene muchos retos: requiere disciplina. Si bien un salón de clases presencial también, ahí no sólo se va a aprender materias, también se desarrollan habilidades sociales de las cuales difícilmente se pueden adquirir frente a una pantalla. Este reto implica también a los docentes el actualizarse y desarrollar habilidades para preparar material y buscar opciones para llevar a sus pupilos a un aprendizaje deseable y suficiente. Seguramente cuando vuelvan las clases presenciales, mucho de este conocimiento tecnológico podrá ser mejor aprovechado y cada vez se apoyarán más las instituciones en las herramientas para por un lado dar seguimiento y por otro disponer de mejores opciones para lograr los objetivos académicos.
Entonces ¿aprovechamos esas ventajas?
Analfabetismo funcional
Desde que existe el internet han existido los llamados trolls. Personas que se dedican a denostar, insultar o llevar la conversación sobre un tema con insultos o de forma tendenciosa normalmente de forma informada, pero ahora ha crecido el número de personas que, en una noticia dada, no se toman la molestia de leerla y sólo insultan y agreden sin saber. Hace unos días El Siglo publicó una nota acerca de la cantidad de personas que fueron al llamado de FRENAA en el Zócalo de la CDMX. La nota describía la posición del gobierno en cuanto a la cantidad de personas que asistieron (unas 8 mil) y las que la organización en cuestión indicó (unas 180 mil). Si bien en la nota se dieron las posiciones y números que se hicieron oficialmente y a pesar de que la nota era de una agencia, muchísima gente se fue con el título y comenzaron a insultar y agredir al medio. Ahora es más evidente que nunca nuestra capacidad de análisis y comprensión lectora.
Jorge Martínez Mauricio, Twitter @toro