Eric Trump, hijo del presidente de Estados Unidos, Donald Trump, tendrá que testificar ante fiscales de Nueva York antes de las elecciones del próximo mes de noviembre por una investigación de fraude en torno al negocio inmobiliario de la familia, según decidió este miércoles un juez.
La fiscal general del estado de Nueva York, Letitia James, que es la encargada del caso, celebró que el magistrado no vaya a permitir a Trump retrasar hasta después de los comicios una "entrevista bajo juramento" solicitada por su oficina.
Según la decisión del juez, el hijo de Donald Trump deberá comparecer como muy tarde el 7 de octubre ante la Fiscalía, pese a sus intentos por posponer la citación al menos hasta después de las elecciones del 3 de noviembre.
La fiscal general tiene abierta una causa civil para investigar si la Organización Trump, la empresa del presidente, infló indebidamente el valor de sus activos en documentos, con el objetivo de asegurar préstamos y obtener beneficios económicos y fiscales.
La investigación arrancó en 2019, después de que el exabogado de Trump Michael Cohen testificara ante el Congreso de Estados Unidos que "los activos fueron inflados para obtener términos favorables para los préstamos y la cobertura de seguros, mientras que también desinflaron el valor de otros bienes para reducir los impuestos de bienes raíces".
El mes pasado, James había acusado a la empresa de tratar de entorpecer el proceso y, en concreto, había denunciado que Eric Trump, vicepresidente ejecutivo de la firma, se estaba negando a ser entrevistado pese a haber aceptado anteriormente.
Ahí fue cuando la fiscal acudió al juez para pedir que se obligara a los testigos solicitados a comparecer y para forzar a la empresa a facilitar documentos sobre propiedades y transacciones específicas.
Este no es el único proceso abierto en torno a Trump y sus negocios, pues también en Nueva York el fiscal del distrito de Manhattan, Cyrus Vance, está estudiando otros posibles delitos, incluidos el fraude bancario y de seguros, según sugirió recientemente en documentos judiciales.
Vance y Trump están enzarzados en una larga batalla legal sobre el acceso a las declaraciones de impuestos del mandatario, que éste no ha hecho públicas y que el fiscal reclama como parte de un caso en el que investiga si los pagos de dinero en secreto de la campaña del ahora presidente a la actriz porno Stormy Daniels violaron la legislación del estado de Nueva York.
Supuestamente, con ese dinero se buscó pagar el silencio de la actriz sobre una presunta relación sexual que mantuvo hace años con Trump, algo que él siempre ha negado.