El secretario de Estado español para la Unión Europea, Juan González-Barba, afirmó este martes que la situación de la negociación de la relación futura con el Reino Unido tras el Brexit "no invita al optimismo", y para que se logre o no un acuerdo, serán necesarios pactos bilaterales en varias áreas.
"No nos engañemos, la situación no invita al optimismo", indicó González-Barba a la prensa tras participar en un Consejo de ministros de Asuntos Generales de la UE, en el que se abordó la negociación con Londres, después de que el Gobierno británico haya empezado a trabajar en una ley que pretende revertir sus compromisos del acuerdo del Brexit respecto a la frontera irlandesa.
El secretario de Estado español dijo que todos los intervinientes en el Consejo aludieron a la necesidad de "tener a punto medidas de preparación e incluso de contingencia en caso de no acuerdo".
Pese a que recordó que es necesario cerrar un acuerdo sobre la futura relación a mediados o a más tardar a finales de octubre, para que pueda ser aprobado en los parlamentos a tiempo de que pueda entrar en vigor el 1 de enero, "no ha habido avances relevantes en las principales cuestiones más importantes para la UE y, por tanto, más importantes también para el Reino Unido", dijo.
"Porque en la medida en que no haya concesiones para una parte no las habrá para la otra", advirtió, al tiempo que dejó claro que "la unidad del Consejo es máxima en este dossier tan clave"
Sobre el proyecto de ley que tramita el Gobierno británico, recordó que la Comisión Europea "ha tomado nota de este incumplimiento, que denota una mala fe, y ha escrito una carta pidiendo precisiones", y que en función de la respuesta "se reserva todas las opciones posibles, sin especificar cuáles son".
En cualquier caso, el paso de Londres ha sido considerado como "una iniciativa de mucha gravedad para conseguir mantener la buena fe negociadora y alcanzar un acuerdo" sobre la relación futura por parte de los Estados miembros, comentó.
En caso de que no haya acuerdo, desde el 1 de enero todos los países deberán tomar medidas de contingencia, avisó, algunas de las cuales están ya contempladas en el acuerdo de retirada, aunque apuntó que "de todas maneras, la esperanza no se ha perdido".
No obstante, dijo que "acuerdos bilaterales iba a haber incluso si había un acuerdo" general con Londres, ya que hay "ámbitos en los que el Reino Unido prefería que no hubiera un acuerdo con la UE", como en seguridad y defensa, donde ya trabaja bilateralmente España con ese país dadas sus "relaciones sustanciosas" en ese tema.
El secretario de Estado también señaló que serán necesarios acuerdos complementarios para coordinar algunos aspectos de la seguridad social.
González-Barba admitió que, si se han diluido algunas expectativas sobre la futura relación, ha sido "para que haya un acuerdo", aunque "nunca ha sido la UE la que ha tirado a la baja la ambición del acuerdo".
Por su parte, el vicepresidente de la Comisión para Relaciones Interinstitucionales, Maros Sefcovic, dijo en una rueda de prensa al término del Consejo que se mantiene el plazo dado a Londres para que retire la propuesta de ley con la que quiere modificar la salvaguarda acordada para Irlanda del Norte, que a juicio de la UE pone en riesgo el acuerdo de paz en la región.
Sobre las negociaciones, Sefcovic dijo: "Estamos totalmente comprometidos con su total implementación a tiempo, nada más y nada menos".