El trato a Lozoya, quien López Obrador dijo es "testigo colaborador", ha sido calificado por algunos como exclusivo.
CIUDAD DE MÉXICO.- La madrugada del 16 de julio, Emilio Lozoya, exdirector de Petróleos Mexicanos (Pemex), fue extraditado de España a México por los delitos de "lavado" de dinero, asociación delictuosa y cohecho, en los casos de Odebrecht y Agronitrogenados.
Un avión Bombardier Challenger 605 lo trajo desde Madrid, con escala en Canadá, y al llegar al Aeropuerto de la Ciudad de México, personal médico revisó su estado de salud y se le aplicaron protocolos de derechos humanos, para después llevarlo a un hospital privado por presentar anemia y problemas en el esófago.
Entre dudas de la identidad del exdirector de Pemex, fuentes de la Fiscalía General de la República (FGR), a cargo de Alejandro Gertz Manero, indicaron que Lozoya no llegó al Reclusorio Norte.
Fuentes federales confirmaron a EL UNIVERSAL que la persona que arribó al Reclusorio Norte, en medio del fuerte operativo de seguridad, se trató de un distractor.
El trato a Lozoya, quien López Obrador dijo es "testigo colaborador", ha sido calificado por algunos como exclusivo, además de que ha gozado de privilegios desde su llegada a México, donde ha revelado que actuó por instrucciones del expresidente Enrique Peña Nieto y de Luis Videgaray.? Incluso el presidente Andrés Manuel López Obrador, en su conferencia mañanera del pasado 20 de julio, refirió que era valioso todo lo que Lozoya iba a decir y externó a la FGR: "que a este señor lo cuiden".
"Dicen algunos: 'No, no está en la cárcel, está en un hospital' Pues hay que cuidarlo, no sólo por su salud, que también merece eso como cualquier ser humano, sino cuidarlo físicamente", expresó el Presidente.
Pero ¿Cuáles son los privilegios de los que goza Lozoya?
La madrugada del 1 de agosto, fue dado de alta y salió del hospital custodiado por elementos de la Policía Federal Ministerial de la FGR sin que se conociera su paradero. Tampoco se han dado a conocer imágenes del exdirector de Pemex.
Por la pandemia de Covid-19, Lozoya firmó la tarde de ese mismo día, vía electrónica, el libro de procesados para no perder la libertad condicional.
Envió un correo a las autoridades judiciales que le impusieron como medida cautelar firmar cada primero y 15 de mes, para mantener el beneficio de la libertad.
En su columna del 11 de agosto, publicada en esta casa editorial, Carlos Loret de Mola refirió que para celebrar su libertad, después de meses prófugo, varios meses encarcelado en España y unos días en un hospital, el exdirector de Pemex realizó una reunión en su casa con pocos allegados.
"Alguno de los invitados llegó con un carísimo regalo: una preciosa caja de madera que contenía tres botellas de Château Margaux, uno de los vinos más prestigiados del mundo, con valor de 25 mil pesos cada una. Había que festejar. La estrategia había funcionado. Emilio Lozoya Austin, exdirector general de Pemex, estaba en casa otra vez", escribió Loret .
Hasta ahora no se conoce el destino del exdirector de Pemex y apenas este jueves, un tribunal federal confirmó el amparo concedido a Lozoya para que la FGR deje sin efectos el aseguramiento de su residencia en Lomas de Bezares, alcaldía Miguel Hidalgo.