"Con las mujeres y el pescado, mucho cuidado", dice un refrán de los tiempos en que pescar era solo cosa de hombres. La estadística y la realidad en los muelles de Miami muestran que la diversidad, no solo de género, ha llegado a la pesca para quedarse.
En Estados Unidos, de los 50,1 millones de personas que pescaron por diversión en el último año, 17,9 millones eran mujeres, la cifra más alta desde que lleva la cuenta la Fundación de Pesca y Navegación Recreativas (RBFF), una organización que promueve esas actividades en internet y las redes sociales y con campañas como Take Me Fishing (Llévame a pescar).
También los latinos dieron un salto importante al llegar a 4,4 millones de aficionados a una actividad que algunos ven como un deporte y otros como una manera de mejorar la dieta familiar en tiempos económicamente difíciles como los actuales.