Al menos 72 personas han sido detenidas este sábado tras participar en una protesta ecologista ante tres plantas de impresión del Reino Unido que retrasó la distribución de los principales periódicos británicos a los quioscos del país.
Desde la noche del viernes, un centenar de activistas del grupo Extinction Rebellion bloqueó el acceso a las rotativas Newsprinters -propiedad de News Corporation, del magnate estadounidense Rupert Murdoch- en Inglaterra y Escocia para condenar que sus cabeceras "no informan de la crisis climática y manipulan la verdad para satisfacer sus intereses".
Con eslóganes como "Libera la verdad", los manifestantes cortaron las carreteras que llevan a las plantas de Broxbourne (centro de Inglaterra), Knowsley (noroeste) y Motherwell (Escocia), lo que impidió la salida de los camiones que debían repartir diarios como "The Sun" y "The Times", de Murdoch, y otros impresos allí, como "The Daily Mail", "The Daily Telegraph" y "Financial Times".
En Broxbourne, la Policía de Hertfordshire efectuó 42 detenciones, y otras 30 personas han sido arrestadas en Knowsley, mientras que en Motherwell la protesta transcurrió sin disturbios, según ha indicado la Policía local.
En un comunicado, Newsprinters condenó "este ataque contra toda la prensa libre" y advirtió de que, aunque podría imprimir las cabeceras con el apoyo de rotativas rivales, no podría evitar retrasos en su distribución.
El primer ministro británico, Boris Johnson, excolumnista del "Telegraph", escribió en Twitter que "una prensa libre es fundamental para someter a escrutinio al Gobierno" y consideró "completamente inaceptable limitar el acceso del público a las noticias".
La ministra del Interior, Priti Patel, ha lamentado que "habrá gente en todo el país que no podrá leer su periódico por los actos de Extinction Rebellion" y despreció "esta afrenta a nuestra prensa libre, sociedad y democracia".
El grupo ecologista empezó el 1 de septiembre diez días de protesta en diversas ciudades del Reino Unido, con concentraciones en lugares emblemáticos como el palacio de Buckingham y la sede del Banco de Inglaterra en Londres.
El pasado jueves, más de 300 personas fueron detenidas en manifestaciones en la capital británica, y la Policía advirtió de que se enfrentan a multas por no respetar la normativa de protección contra la COVID-19.