Israel inició hoy su vuelta al cole en medio de una segunda ola de COVID-19 sin controlar y un preocupante récord ayer desde el inicio de la pandemia de coronavirus, con los alumnos sujetos a estricta higiene, aulas en parques y teatros y grupos separados.
La incertidumbre por la pandemia y el riesgo de que los centros se conviertan en focos de infección -como pasó la primavera pasada- no hizo dar marcha atrás al Ejecutivo, que a última hora de ayer decidió no abrir los centros educativos en zonas con alta morbilidad, pero priorizó que alrededor de 2,5 millones de alumnos retomaran hoy la formación.