Al argumentar que hay un menor espacio para el relajamiento monetario, la subgobernadora del Banco de México (Banxico), Irene Espinosa Cantellano, fue la única que votó a favor de reducir el objetivo para la Tasa de Interés Interbancaria a un día en 25 puntos base a un nivel de 4.75%.
Sin embargo, el resto de los miembros de la junta de gobierno decidió, por mayoría, que la tasa debería bajar en medio punto porcentual para que quedara finalmente en 4.5%.
Así lo dio a conocer Banxico esta mañana en la Minuta número 78 con motivo de la decisión de política monetaria anunciada el pasado 13 de agosto.
En la exposición de motivos para emitir su voto disidente, Irene Espinosa explicó que a partir de marzo anunciaron medidas para proveer liquidez y complementariamente aceleraron el ritmo de relajamiento de la política monetaria para enfrentar los choques provocados por la pandemia.
Influencia desinflacionaria.
Desde entonces los mercados financieros han evolucionado favorablemente y la actividad económica parece haber cruzado un punto de inflexión, aseguró.
Sin embargo, advirtió que la inflación persiste por encima del objetivo, continúa al alza, ha rebasado recientemente los pronósticos de corto plazo y sus expectativas se han incrementado.
Expusó que este comportamiento, en medio de la más severa recesión histórica, sugiere que debemos reconsiderar la influencia desinflacionaria atribuida al componente cíclico de la actividad económica.
También puso de relieve que a pesar de la posición monetaria relativa, los flujos de salida de inversionistas extranjeros han destacado en comparación con otras economías emergentes.
"Ello apunta a un menor espacio para el relajamiento monetario, por lo que debemos ajustar el ritmo para reforzar la convergencia de la inflación y sus expectativas a la meta de 3%", consideró.