Durante la emergencia sanitaria el sistema de justicia se paralizó y el Poder Judicial, en todos sus niveles.
Durante el periodo de la cuarentena por el Covid-19, la violencia familiar contra las mujeres aumentó en niveles poco antes vistos, por lo que las autoridades deberán replantear su estrategia para prevenir este delito, señalaron especialistas en la materia.
En el foro "La violencia contra la mujer en tiempos de la pandemia del Covid-19", organizado por la Fundación Miguel Alemán A.C., expertas en derecho y género advirtieron que en los últimos meses han aumentado las llamadas de emergencia y las denuncias por violencia familiar, situación que obligará a las autoridades a replantear su estrategia contra el ilícito.
"El encierro ha potencializado todas las conductas nocivas contra las mujeres, si antes había un peligro real en el interior de los hogares, tal parece que en este momento de pandemia el principal enemigo de la vida digna, del desarrollo de las mujeres, está ahí, en el interior", comentó Vianney Fernández, maestra en Administración y Políticas Públicas por el Centro de Investigación y Docencia Económicas (CIDE).
La especialista indicó que fue en marzo cuando las llamadas de emergencia por agresiones contra este sector llegaron a su límite histórico, según el Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública.
Julieta Morales, maestra y doctora en Derecho por la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), agregó que durante la pandemia "los agresores actuaron con mayor seguridad y sin límites, esto sucedió porque muchas estructuras del Estado estaban deshabilitadas. Es importante que no haya impunidad y que haya verdadero acceso a la justicia para evitar la reproducción social de la violencia de género".
La experta agregó que durante la emergencia sanitaria el sistema de justicia se paralizó y el Poder Judicial, en todos sus niveles, se tardó en reaccionar en la implementación de mecanismos digitales para atender a las víctimas.
Rosario Guerra, licenciada en Ciencia Política y Administración Pública por la UNAM, dijo que para hacer frente a esta problemática debería haber una mejor coordinación entre los centros de vigilancia C4 Y C5 con las organizaciones estatales de atención a las mujeres, y contar con una línea de escucha para apoyo médico, psicológico o jurídico.
"El Covid-19, de entre todos los males causados, nos ofrece también la oportunidad de ver esta violencia intrafamiliar y hacerla visible para poderla combatir, con ayuda médica, psicológica y capacitación para el trabajo en el desempleo", indicó Rosario Guerra.
Layda Negrete, maestra en Derecho y Política Pública por la Universidad de California en Berkeley, puso sobre la mesa la necesidad de dar un giro de 180 grados a la estrategia que las autoridades siguen contra la violencia de género.
En su participación señaló que, lejos de seguir pensando en refugios para mujeres víctimas, se tienen que pensar mecanismos para extraer al agresor de los hogares. Y también se tienen que diseñar estrategias para prevenir las agresiones tomando en cuenta las llamadas de emergencia y no las denuncias.
"La política pública para atención a la violencia en casa ha sido prácticamente una respuesta nula, las agencias del ministerio público no están capacitadas para atender este fenómeno", criticó Layda Negrete.
Este foro de discusión fue transmitido en vivo en las redes sociales de EL UNIVERSAL y fue moderado por Guadalupe Gómez Maganda, del Programa de Equidad de Género de la Fundación Miguel Alemán, y el doctor Sergio García Ramírez, profesor emérito de la UNAM.