El Ministerio de Sanidad de Gaza ha detectado 18 nuevos casos de COVID-19, aunque todos ellos están aislados en las zonas de cuarentena para viajeros a la entrada en la Franja, donde una expansión de la enfermedad sería muy complicada por su densidad de población y el mal estado de su sistema sanitario.
Tras informar ayer por la mañana de tres nuevos casos, después de semanas sin ningún positivo en el enclave costero palestino controlado por el movimiento islamista Hamás, las autoridades sanitarias contabilizaron otros 18 nuevos positivos.
"Todos ellos han regresado a la Franja de Gaza la semana pasada y esta semana, tanto procedentes de Egipto como de Israel", señaló Sanidad en un comunicado anoche, que indica que todos ellos "están en los centros de cuarentena" instalados para hacer frente a la pandemia.
Desde que se detectó el primer caso en Gaza, el 5 de marzo, el ministerio ha informado de 108 infectados y una muerte. De estos, 70 se han recuperado y 37 reciben tratamiento médico en varios centros de cuarentena.
El aislamiento de la Franja, bajo bloqueo israelí desde que Hamás tomó el poder en 2007 y con largos cierres de frontera con Egipto, ha permitido que esta se libre de la expansión del virus, que no ha llegado a afectar a sus dos millones de habitantes. Por el momento, todos los positivos localizados fueron casos importados.