Un juzgado español decidió que Iñaki Urdangarin, cuñado del rey de España, pueda salir de la prisión donde cumple una condena por corrupción un fin de semana al mes para paliar la situación de aislamiento en la que se encuentra, pues se trata de una cárcel para mujeres.
Urdangarin, casado con Cristina de Borbón, hermana del Felipe VI, cumple desde 2018 una pena de cinco años y diez meses en un módulo que solo ocupa él en la cárcel de Brieva (provincia de Ávila, centro).
Fue condenado por malversación, prevaricación, fraude a la Administración, dos delitos fiscales y tráfico de influencias en relación con el desvío de más de seis millones de euros de dinero público entre 2003 y 2006 al Instituto Nóos, una institución sin ánimo de lucro que él mismo presidía.
Clasificado anteriormente como interno en segundo grado, ya tenía derecho a disfrutar de 36 días al año fuera de la cárcel, con un máximo de siete cada vez, y desde septiembre pasado acudía a desempeñar tareas de voluntariado en el Hogar Don Orione, un centro para discapacitados situado en la localidad madrileña de Pozuelo de Alarcón.
Pero tanto esta labor de voluntariado como los permisos a los que tiene derecho se suspendieron en marzo por la epidemia de coronavirus.
Ahora un juzgado de vigilancia penitenciaria aprobó su salida de un fin de semana mensual a propuesta de la Secretaría General de Instituciones Penitenciarias, dependiente del Ministerio del Interior, aunque con la oposición de la Fiscalía, informaron este viernes fuentes del Tribunal Superior regional de Castilla y León.