Al conmemorar 499 años del suceso histórico, especialistas reflexionan en los factores que influyeron más allá de señalar como traidores a pueblos y personajes.
La caída de Tenochtitlan se dio el 13 de agosto de 1521, cuando las huestes españolas y sus aliados lograron capturar a Cuauhtémoc, el último tlatoani mexica. Casi 500 años después hay algunas corrientes de pensamiento que señalan a los tlaxcaltecas, aliados de los conquistadores, y a La Malinche, como traidores; sin embargo, especialistas invitan a no analizar la historia como sucesos en los que participaron “malos y buenos”.
Los arqueólogos Arturo Montero y Eduardo Matos Moctezuma analizan los factores que incidieron para la caída de Tenochtitlan y sostienen que la conmemoración de esa efeméride puede servir para reflexionar sobre la situación actual y para matizar algunos sucesos.
La caída de Tenochtitlan no fue un suceso aislado, fue parte de un proceso que se consumó cuando fue capturado Cuauhtémoc en 1521; sin embargo, antes se dieron otros hechos, como la Batalla de Centla (marzo de 1519), la Matanza de Cholula (octubre de 1519), la Matanza de TóxcatL (mayo de 1520), la Noche Triste (junio de 1520) y la Batalla de Otumba (julio de 1520), ésta última fue la única ocasión en la que el ejército español fue doblegado por los mexicas.
¿Pero, qué provocó la caída de Tenochtitlan? El arqueólogo Eduardo Matos Moctezuma, integrante de El Colegio Nacional, explica que hubo diferentes factores que incidieron y que cuatro fueron los principales, aunque indica que no sólo cayó el imperio mexica, también Tlatelolco.