El secretario de Estado de EU, Mike Pompeo, respaldó hoy en Praga las demandas de "libertad" de los ciudadanos bielorrusos y pidió al régimen de Minsk que no use la fuerza contra los manifestantes pacíficos.
"Queremos que el pueblo bielorruso tenga la libertad que está exigiendo", dijo Pompeo en una rueda de prensa con el primer ministro checo, Andrej Babis.
"Pedimos que se proteja a los manifestantes no violentos, que no se les ataque", afirmó el jefe de la diplomacia estadounidense, que se encuentra en la capital de la República Checa como primera escala de una visita a cuatro países centroeuropeos.
"Espero que la Unión Europea no recurra solo a declaraciones, sino que actúe y tome medidas, porque los bielorrusos tienen el mismo derecho a la libertad y la democracia que todos", declaró Pompeo.
Miles de personas han sido detenidas en Bielorrusia en las últimas tres noches de protestas contra los resultados de las elecciones presidenciales del 9 de agosto, que concedieron una arrolladora victoria al actual mandatario del país, Alexandr Lukashenko, que dirige el país desde hace más de un cuarto de siglo.
La oposición considera las elecciones un fraude y su líder, Svetlana Tijanóvskaya, se ha visto obligada a huir a Lituania.
Babis, por su parte, dijo que lo sucedido en Bielorrusia es "inaceptable" y afirmó que le ha "impactado" personalmente ver que algo así pasaba en Europa.
La gira centroeuropea de Pompeo tiene en la agenda tratar de contrarrestar la influencia energética rusa y tecnológica china, esta última en el desarrollo de la tecnología 5G.
El jefe de la diplomacia estadounidense consideró en Praga que cada vez más países son conscientes del riesgo para su seguridad que supone dejar en manos de compañías inadecuadas la tecnología 5G, en una crítica dirigida a empresas chinas.