El precio del petróleo intermedio de Texas (WTI) abrió este martes con una bajada del 1,37 %, hasta los 40,45 dólares el barril, lastrado por la preocupación respecto a una segunda ola de coronavirus en Estados Unidos y el resto del mundo, que ha renovado los temores por otro posible desplome de la demanda.
A las 09.04 hora local (13.04 GMT), los contratos futuros del WTI para entrega en septiembre restaban 0,56 dólares con respecto al cierre de la sesión previa del lunes.
El barril de referencia estadounidense retrocedía en medio del resurgimiento de la pandemia de COVID-19 y con cierto pesimismo por la vuelta a los mercados de más barriles procedentes de los Estados miembros de la Organización de Países Exportadores de Petróleo y sus aliados (OPEP+).
El cártel petrolero a partir de agosto ha reducido su histórico recorte de producción, por lo que espera que se añadan a la oferta alrededor de 1,5 o 2 millones de barriles por día (bpd), hasta situar el recorte en unos 7,7 millones de bpd.
"Agosto será un mes de cierta volatilidad de precios. (...) Los precios del petróleo del martes están cayendo a medida que en Asia y Europa están aumentando las preocupaciones de que el crecimiento en el número de infectados ahora no solo se limite a los Estados Unidos y Brasil, sino también al resto del mundo a través de una segunda ola", aseguró en una nota la analista de Rystad Energy Paola Rodriguez-Masiu.
Estados Unidos acumula ya más de 4,7 millones de contagios de COVID-19 y 155.478 muertes, según datos recopilados por la Universidad Johns Hopkins.
Además, en los últimos días continúa registrando decenas de miles de infecciones diarias, si bien se han reducido en los últimos días en comparación con semanas previas.