El arresto de una manifestante por parte de la Policía de Nueva York este martes ha causado fuertes críticas, tras la publicación de un vídeo en el que se ve cómo los agentes fueron directamente por ella y se la llevaron en un vehículo sin distintivos.
El incidente generó una gran indignación en las redes sociales y varios políticos locales expresaron rápidamente su preocupación por esas tácticas policiales, parecidas a las utilizadas recientemente por agentes federales en Portland (Oregón) y que han sido denunciadas desde muchos sectores.
La detenida, identificada como Nikki Stone, de 18 años, fue puesta en libertad durante la madrugada del miércoles tras haber pasado unas cinco horas bajo custodia policial y ser acusada de vandalismo y delitos contra la propiedad.
En un comunicado, la Policía señaló que la mujer estaba siendo buscada por dañar cámaras policiales en cinco incidentes separados en las inmediaciones del Ayuntamiento de la ciudad.
Sobre el uso de un vehículo sin distintivos, el Departamento de Policía de Nueva York (NYPD) explicó que es algo habitual cuando se busca a un sospechoso y defendió que la detención tuvo lugar tras un cordón formado por agentes perfectamente identificados.
El arresto se produjo en un momento de fuerte tensión en Estados Unidos, después de que el Gobierno de Donald Trump decidiese desplegar agentes federales en la ciudad de Portland en respuesta a las protestas que se suceden desde hace aproximadamente dos meses por la muerte de George Floyd, un hombre negro, a manos de la Policía en Minesota.
La Administración, además, planea llevar agentes federales a otras grandes ciudades del país, al considerar que las autoridades locales y estatales no están haciendo lo suficiente para mantener el orden, una posibilidad ante la que Nueva York ha mostrado su total oposición.
Los demócratas denuncian que el movimiento es un juego político por parte de Trump con la vista puesta en las elecciones de noviembre.
El presidente del Concejo de Nueva York, Corey Johnson, consideró el vídeo del episodio "increíblemente inquietante", mientras que el fiscal de cuentas, Scott Stringer, se mostró "profundamente preocupado".
El concejal Brad Lander, a través de Twitter, apuntó que con "la ansiedad por lo que está pasando en Portland, que el NYPD despliegue furgones sin distintivos con agentes de civil para arrestar en la calle a manifestantes parece más una provocación que seguridad ciudadana".
Carlina Rivera, la concejala que representa al distrito donde se produjo la detención, pidió una investigación y denunció que las tácticas usadas para hacer un arresto por vandalismo en medio de una protestas pacífica suponen un gran exceso por parte de la Policía.