Dinenno fue el héroe del triunfo sobre Querétaro
Pumas encontró refugio entre la tempestad. El doblete de su mejor hombre, Juan Ignacio Dinenno, les dio la victoria en un partido que casi dejan ir por sus propios errores.
Un autogol de Nicolás Freire y un error en un tiro libre los pusieron a merced de Querétaro, equipo que, con un hombre menos por la expulsión de Luna, ya no pudo responder al tercer gol auriazul, 3-2 final.
La respuesta de la visita llegó gracias a Betancourt, quien fue la llave de su ofensiva. Arrastró el balón por la banda hasta línea de fondo, sirvió retrasado y encontró a Islas, pero su remate salió por encima de la meta de «Tala».
El guardameta felino se convirtió en factor. Hizo una atajada monumental ante el remate a escasos centímetros de Sepúlveda.
Pumas encontró esperanza a balón parado. Jerónimo Rodríguez, de gran partido, centró de zurda, Nicolás Freire recentró y Dinenno sólo le tuvo que cambiar la orientación dentro del área chica para encontrar el primer gol. Con el tanto, y el festejo, los felinos liberaron la presión que les generó la salida de Míchel González a tres días de su debut.
La tarde se le nubló a Querétaro que no supo responder al cambio táctico del local, además de la tarjeta roja para Alfonso Luna, por una patada sobre el rostro de Freire que el VAR no dejó escapar.
Cuando mejor andaba el local, Nicolás Freire hizo un autogol grosero. Otorgó el empate por regresar mal el balón a Talavera, quien estaba adelantado. Querétaro tenía vida.
Lillini no aguantó más. Sacó a Favio, que poco generó, y le dio ingreso a Juan Manuel Iturbe. Se fue Míchel, pero los felinos recuperaron al paraguayo. No pasaron ni dos minutos cuando hizo que se moviera el marcador. Recorrió toda la banda izquierda, centró y la pelota le rebotó a Cervantes, quien la metió en propia puerta. Pumas al frente, gracias a Juan Manuel.
Pese a tener un hombre menos, Gallos no se achicó. Con un zapatazo de tiro libre a las afueras del área, con complicidad de Talavera y la barrera, la mandó a guardar y empató los cartones.
Cuando todo parecía oscuridad, apareció Juan Ignacio Dinenno, el mejor de la tarde. Mozo recuperó un balón que tenía perdido, retrasó con un centro, Vigón lo dejó pasar y el delantero argentino no perdonó con un zapatazo que se fue al fondo.
En los últimos instantes, Iniestra vio la roja por una dura falta. No hubo tiempo para más, Pumas sumó sus primeros tres puntos ante Gallos.