No están pidiendo dichas reformas para ya, sino para que se empiecen a platicar y a revisar con especialistas fiscales, académicos y gobernadores, a fin de analizar qué se puede y hasta dónde se puede.
El nuevo presidente de la Asociación de Gobernadores de Acción Nacional (GOAN), el mandatario de Querétaro, Francisco Domínguez Servién, reveló la propuesta con la que los gobernadores panistas irán a la mesa de negociación con el gobierno federal para elaborar un nuevo Pacto Fiscal y una nueva Ley de Coordinación Fiscal que les otorgue mayores recursos a los estados.
Actualmente, las leyes establecen las fórmulas para la distribución de los recursos de la hacienda pública y definen que 80% del total será para la Federación; 15%, para los estados, y 5%, para los municipios, es decir, por cada peso que entregan los estados al gobierno federal —vía impuestos— se les regresan únicamente 15 centavos a las entidades y cinco a los ayuntamientos.
El mandatario queretano detalló a EL UNIVERSAL que la propuesta de los panistas es que la fórmula cambie: que 70% sea para la Federación; 20%, para las entidades, y 10%, para los municipios. Dijo que este nuevo esquema no está fuera de lugar porque las leyes actuales datan de 40 años atrás y la economía ya cambió, así como las aportaciones de los estados a la Federación.
Domínguez Servién mencionó que la fórmula actual es desigual y desequilibrada, y que se necesitan esquemas de distribución que respondan a las necesidades de cada estado y a su población.
Agregó que entienden que el gobierno federal y el Congreso son del partido del Presidente de la República, Andrés Manuel López Obrador, pero dijo que no están pidiendo dichas reformas para ya, sino para que se empiecen a platicar y a revisar con especialistas fiscales, académicos y gobernadores, a fin de analizar qué se puede y hasta dónde se puede: "No es 'cambiemos la fórmula para el ejercicio fiscal que entra el 1 de septiembre'".
Afirmó que los estados del centro y norte del país, incluyendo a la Ciudad de México y al Estado de México, hacen fuerte las finanzas de los del sur-sureste, y si el gobierno federal quiere apoyarlos más, lo puede hacer con los recursos de su 70%.
Agregó que el aumento en el porcentaje lo utilizarán para llevar infraestructura a sus entidades. Lanzó a quienes acusan que los gobernadores quieren más presupuesto para "desviarlo, robarlo y llevarlo a elecciones" que la Secretaría de la Función Pública y la Auditoría Superior de la Federación están para fiscalizar los recursos.
Comentó que, de no actualizarse los porcentajes de la redistribución de los recursos, las finanzas estatales se aprietan porque viene fin de año, se van a tener que reorganizar los gobiernos, adelgazarlos, y va a haber menos programas, obras y acciones en cantidad.
¿Es arcaica la Ley de Coordinación Fiscal y se debe tener un nuevo Pacto fiscal?
— Hace 40 años se hizo la Ley de Coordinación Fiscal con la fórmula que aún nos rige.
La economía de las entidades ya cambió y las aportaciones de los estados hacia la Federación también. De cada peso que captamos en las entidades, la Federación se queda con 80 centavos. Sólo regresa 15 a los estados y cinco a los municipios.
Creemos que la fórmula es desigual y desequilibrada (...) Necesitamos, en lo fiscal, fórmulas de distribución de los recursos que respondan a las necesidades de cada estado y a su población, siempre y de acuerdo en materia también de atribuciones y de recursos.
Nosotros entendemos que la Federación y el Congreso son del partido del Presidente, pero esto no lo estamos pidiendo a la de ya.
En esta petición de un nuevo Pacto Fiscal, ¿qué buscan?
— Hay muchas voces y por eso tiene que haber expertos. Sabemos las necesidades que tiene la Federación, estamos buscando un 70-20-10.
De arranque, no está desprendiendo nada que sea importante para la Federación: es agregarle 5% a los estados y 5% a los municipios. Yo creo que no está fuera de lugar.
La fórmula está publicada en el Diario Oficial de la Federación y habría que correrla en cada estado con base en la población e ingresos, se corre diferente para cada entidad.
¿Están viendo algunos otros elementos que se pudieran considerar en esta fórmula para obtener más recursos?
— Algunos estados captamos más IVA, ISR e IEPS de lo que se manda a la Federación, y te regresan menos de lo que tú mandaste. Son muchos estados del centro y norte, la Ciudad de México y el Estado de México, y todos sabemos que el sur-sureste no hace lo propio.
Por eso está así la ley, porque los recursos que generan riqueza en el centro-norte hacen fuerte al sur-sureste, y estamos de acuerdo en que se utilicen de los impuestos que generamos el centro y el norte para apoyar al sur-sureste, no tenemos ningún pero, sólo que sea en el marco, 70-20-10, y dentro de ese 70%, si se lo quieren llevar al sur-sureste, es decisión completamente del gobierno federal y de la Secretaría de Hacienda con la anuencia del señor Presidente, no le veo ningún inconveniente.
¿Será proporcional a la riqueza que genera cada entidad?
— Es muy importante porque 20% subiría y se tendría que llevar a infraestructura a nuestros estados.
Mucho se ha dicho que para qué quieren el dinero si lo desvían, se lo roban, se lo llevan a elecciones. Yo lo que he venido manifestando es que hoy más que nunca, desde antes, pero hoy más fuerte con el gobierno del presidente López Obrador, [es que se tienen] herramientas muy poderosas: la Secretaría de la Función Pública, que audita los recursos públicos de cualquier sector, y la Auditoría Superior de la Federación, ellos ya llegan a auditorías forenses incluso sin avisarte y si sales mal vienen observaciones y, si no, [te piden] el regreso del dinero, y si el año que entra alguien se atreviera a desviar recursos para las elecciones, ya todos sabemos que desde el año pasado está tipificado como delito electoral.
¿Qué pasaría si no se modifica está fórmula 70-20-10?
— A reorganizar los gobiernos, adelgazarlos; [habría] menos programas, obras y acciones en cantidad.
¿Cómo ve el tema de la inseguridad, los atentados, asesinatos, así como el incremento en delitos de alto impacto?
— Nuestro país tiene dos crisis: la de salud e inmediatamente la económica. En algunas otras entidades tienen problemas de seguridad, ahorita el propio Presidente está haciendo una gira en estos estados, no en México, sino en el mundo.
Cuando tienes una crisis sanitaria y económica, la unidad es lo que saca adelante a un pueblo. Unidos, el gobierno federal, los estados, municipios y, evidentemente, los empresarios y sindicatos.
Sólo con unidad. Habría que hacer pasajes por el mundo cuando ha tenido diferentes crisis, sólo con unidad se sacan adelante.
Es momento, voy a pedir esta semana una reunión con el señor Presidente para hacer lo mismo que hice en la Conago, llamar a la unidad, sentarnos a platicar con el Presidente los diferentes puntos de vista.
¿Cómo ha sido la coordinación con el gobierno federal sobre el Covid-19 y el semáforo que ha generado polémica?
— Hubo polémica, pero ya no hay que echarnos la pelota, es un tema de crisis en favor de la salud de los mexicanos. Es una forma de comunicarnos y lo haremos.
¿Y esta petición de tener interlocución con Jorge Alcocer y ya no con López-Gatell?
— Nosotros no tenemos ninguna diferencia con el subsecretario López-Gatell, nos llamó mucho la atención su conferencia del viernes, en la que pareció que nos estaba asignando la culpabilidad [de los rebrotes del virus] a los estados.
Hizo la diferencia, recompuso el sábado: son los números de la plataforma que no se está alimentando y no se pueden tomar decisiones. Se va a platicar y que nos digan quién está fallando: se suben camas y respiradores disponibles, y ocupación hospitalaria, todo para tomar decisiones y, si alguien no subió, es mejor enterarnos de viva voz que estar discutiendo mediáticamente.
¿Están de acuerdo en que el semáforo sea cada 15 días?
— Sí, lo manifestamos cuando se nos hizo una propuesta, nos ayuda a todos a tener los números en esta plataforma en la que arrojan también una fórmula para llegar al semáforo y se puede ir modificando conforme te van diciendo. Lo estamos preaprobando antes de hacerlo público con el doctor López-Gatell.
El Presidente ha dicho que no va a permitir que los gobernadores se entrometan en las elecciones, ¿qué opina al respecto?
— Tanto el Presidente como los gobernadores estaremos atentos a las elecciones, pero el único árbitro que marca la ley, y eso lo sabemos todos, es el Instituto Nacional Electoral.
Podemos observar y denunciar… sí, pero el árbitro es el INE.