Según confirmaron este domingo activistas locales
NIGERIA.- Al menos 42 personas murieron en ataques perpetrados por terroristas de Boko Haram en el noreste de Nigeria, según confirmaron este domingo activistas locales.
Los ataques tuvieron lugar este sábado en las zonas de las municipalidades de Nganzai y Damboa, ubicadas en el estado nororiental de Borno, principal bastión de la insurgencia yihadista.
Los ataques dejaron 42 muertos solo en el área de Nganzai, mientras que del atentado en Damboa se desconoce la cifra exacta de personas que han perdido la vida, de acuerdo a datos difundidos por el activista local Dogo Shettima a través de las redes sociales.
También medios nigerianos como el diario The Punch informaron sobre los ataques y detallaron que los terroristas, de acuerdo a los testimonios de los testigos presenciales, fueron repelidos por las Fuerzas Armadas de Nigeria.
Ese cuerpo militar, por su parte, confirmó que se realizaron acciones contra la insurgencia yihadista en la zona de Nganzai y en la vecina Monguno.
A través de un comunicado difundido en Twitter, los militares afirmaron haber "infringido grandes bajas" en las filas de Boko Haram y de su escisión Estado Islámico en la provincia de África Occidental (ISWAP).
En la última semana, el conflicto con los yihadistas se ha recrudecido en el estado Borno, donde el pasado martes otro ataque a una aldea nigeriana dejó 81 muertos.
Boko Haram fue creado en 2002 en la localidad de Maiduguri (noreste de Nigeria) por el líder espiritual Mohameh Yusuf, con el propósito de denunciar el abandono al que las autoridades habían sumido a un marginado y empobrecido norte del país.
En aquel momento, sólo efectuaba ataques contra la policía nigeriana, al representar al Estado, pero desde que Yusuf fue abatido por agentes en 2009 el grupo se radicalizó e inició una sangrienta campaña para imponer un Estado de corte islámico.
Desde entonces, el noreste de Nigeria -y en los últimos años las áreas de Camerún, Chad y Níger fronterizas a su vez con la cuenca del lago Chad- viven bajo una doble amenaza yihadista.
En la última década tanto Boko Haram, como más tarde su escisión el Estado Islámico en la provincia de África Occidental, han asesinado a más de 27,000 personas y desplazado de sus casas a cerca de tres millones, según datos de la ONU.