"Finalmente entré a grabar y él estaba con morfina, estaba muy delicado físicamente, estaba muy jodido y fue un poco duro porque claro, estás haciendo música un poco a contra reloj y viendo a un amigo, un compañero cómo poco a poco se va desvaneciendo"
"Mira, estoy ya muy mal, muy mal, no creo ni que pueda acabar el disco", fueron las palabras que el cantante Pau Donés le dijo al músico Dani Baraldés cuando lo invitó al que sería su último trabajo.
"Necesito que seas tú el guitarrista, quiero que seas tú'".
Dani recuerda que estaba asustado porque Donés, quien falleció ayer tras perder la lucha contra el cáncer, le contó que se iría a Barcelona y el disco se grabaría rápido.
"Finalmente entré a grabar y él estaba con morfina, estaba muy delicado físicamente, estaba muy jodido y fue un poco duro porque claro, estás haciendo música un poco a contra reloj y viendo a un amigo, un compañero cómo poco a poco se va desvaneciendo", comenta a EL UNIVERSAL.
"Él estaba ya en la recta final, claro, estaba muy mal pero él aprovechaba hasta el último minuto, el último segundo, estuvo ahí exprimiéndolo todo. Cuando venía era a tope, con alegría, tú lo veías que de cuerpo estaba deteriorado pero de espíritu y ganas como siempre un auténtico ciclón", recalca.
Junto al grupo español Jarabe de palo, del que Pau fue líder hasta su muerte este 9 de junio, Dani grabó 4 discos: "Orquesta reciclando", "Y ahora que hacemos", "Somos" y el más reciente "Tragas o escupes".
Además estuvo de gira con él por 3 o 4 años y siempre tuvieron una buena relación no solo laboral sino de amigos.
Su gran despedida
El guitarrista recuerda el último día que estuvieron juntos en el estudio en la grabación de "Tragas o escupes"; la pasaron comiendo, recordando momentos de la gira y anécdotas.
"Luego por el chat nos dijo que nos quería mucho a todos y que se iba a la montaña a descansar entonces para nosotros fue una despedida. Me consta que se despidió de todo el mundo" dice.
Pero sin duda la que considera la gran despedida del compositor de "La flaca" fue en Luz de gas, en Barcelona, donde en diciembre ofrecieron un concierto de recaudación de fondos en el que estuvieron presentes la gran mayoría de los músicos que en sus 25 años de trayectoria tuvo Jarabe de Palo.
"Nos consiguió juntar y para mí eso fue la gran despedida en diciembre", señala Dani.
A pesar de la pandemia Pau, quien murió a consecuencia del cáncer de colon que padecía, pudo seguir con su proyecto. Según relata Baraldés su idea era acabar el disco.
"Justo la pandemia llegó como a la mitad y él con todas las medidas de seguridad intentó acabar el disco y lo consiguió. Fue una lástima porque a lo mejor sin la pandemia hubiera hecho alguna cosilla más pero son cosas que no se pueden controlar".
"Seguirá con nosotros su legado y sobre todo aprender de su gran lección de vida porque yo creo que ha sido una gran lección de que vivir es urgente y que tenemos que escribir hasta el último segundo de esta vida con alegría".