VANGUARDIA/EL TIEMPO
BÉLGICA.- Las personas mayores y más débiles que contraigan el coronavirus deben morir en las residencias de ancianos en vez de ser hospitalizadas. Es la directiva que la Sociedad Belga de Gerontología y Geriatría ha hecho llegar a los médicos de los geriátricos del país y de la que se han hecho eco estos días periódicos locales.
La recomendación, publicada en el portal web de la institución, concierne a los residentes en quienes es evidente que el covid-19 será fatal para ellos. En concreto aquellos que sufren demencia y problemas físicos que les debilitan hasta tal punto que ya tenían un pronóstico previo de muerte de hasta un año.
"En los hospitales no hay nada más que podamos hacer por ellos”, declaró Nele Van Den Noortgate, jefa del departamento de geriatría en Gante.
“Son pacientes para quienes el tratamiento puede prolongar la vida, pero que ofrecen pocas posibilidades de recuperación”, ha asegurado la jefa del departamento de geriatría en Gante y profesora del hospital universitario de la misma ciudad, Nele Van Den Noortgate, a la prensa belga.
“En los hospitales no hay nada más que podamos hacer por ellos que brindar buenos cuidados paliativos de los que también pueden beneficiarse en los geriátricos. Sería inhumano transportarlos al hospital para que murieran allí”, ha añadido Van Den Noortgate.
Aunque es ahora, debido a la saturación de hospitales por la pandemia del coronavirus, cuando se insiste más en aplicar estas pautas, en realidad también se siguen para pacientes con otras patologías, de acuerdo con la profesora. “Una buena atención también significa atreverse a darse cuenta de que las personas pasan de la vida a la muerte y asegurarse de que el proceso no se extienda innecesariamente”, ha señalado.
Cabe recordar que Bélgica es uno de los tres únicos países europeos donde la eutanasia es legal, junto con Holanda y Luxemburgo. Es en este contexto donde se inscriben las declaraciones de la especialista en geriatría. En un país que está acostumbrado a acompañar a las personas moribundas hacia el final de la vida mediante la ayuda de los médicos.
“Sería inhumano transportarlos al hospital para que murieran allí”, aseguró.
Si los ancianos sin posibilidad de sobrevivir se quedan en las residencias también se reduce el riesgo de infección del personal sanitario y se evita sobrecargar unos ahora mismo muy saturados hospitales.
En este sentido, el jefe de epidemiología clínica del Centro Médico de la Universidad de Leiden, Frits Rosendaal, hacía la semana pasada una distinción entre los países del sur y del norte en cuanto a la admisión de pacientes en hospitales. “Ellos (por países como Italia y España) admiten (en los hospitales) a personas que nosotros (en Holanda) no admitimos porque son demasiado viejas”.
El modelo holandés selecciona a los pacientes con mayores posibilidades de sobrevivir para evitar la saturación de hospitales. Esto se debe, principalmente y de acuerdo con el especialista, a la distinta “posición cultural” que ocupa la gente mayor en las sociedades española o italiana, donde se les trata de curar a cualquier precio.
Desde que Bélgica empezó a contabilizar los pacientes hace dos semanas ha registrado al menos 12 mil 775 casos de personas que han dado positivo por contagio de covid-19, de los que 876 fueron diagnosticados el lunes.