REDACCIÓN/EL TIEMPOHuyeron por debajo del portón; maestra cayó en crisis.
Un niño y una niña escaparon del kínder la mañana de ayer, por debajo de un portón de malla ciclónica, para ir a la casa de ella ubicada a dos cuadras del plantel, para ver un perrito.
La ausencia de los niños alertó al personal docente del Jardín de Niños Benito Juárez, ubicado en la colonia Santa Eulalia, reportándose los hechos y acudiendo autoridades para tomar conocimiento.
Afortunadamente, los dos pequeños regresaron sanos y salvos minutos más tarde.
La madre de la pequeña, al verlos llegando a casa, los llevó de nuevo al kínder, donde la maestra estaba con el alma en un hilo.
Al final, la docente tuvo que recibir la atención por parte de paramédicos, pues cayó en una fuerte crisis nerviosa, al no encontrar a sus dos alumnos dentro del plantel.
Los hechos se registraron cerca de las 11:00 horas de ayer, cuando la maestra del segundo año del citado jardín de niños, se percató que le faltaban dos alumnos.
Aterrorizada, alertó al resto de maestros, quienes los buscaron y al no hallarlos, solicitaron el apoyo policiaco. Elementos de Policía Escolar, fueron los primeros en llegar al plantel ubicado en calles Minerva Cantú con María Esther Zuno.
Los uniformados tomaron la media filiación de los niños y empezaron con su búsqueda en los alrededores, por fortuna, ya iban de regreso al Jardín de Niños, en compañía de la madre de familia.
La señora se entrevistó con el personal docente y les comentó lo que había sucedido: los niños fueron a ver a un perrito que acababa de nacer.
Debido a su inocencia, nunca se imaginaron el riesgo que pasaron al ir caminando solitos a la casa de la niña, mucho menos en el enorme problema que causarían al plantel.