Autoridades del Servicio de Inmigración y Control de Aduanas de Estados Unidos informaron que se utilizó para controlar una protesta en un centro de detención de LuisianaVANGUARDIA / EL TIEMPO
ESTADOS UNIDOS.- El Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE) admitió el miércoles que agentes suyos en un centro de detención en Luisiana que el gas pimienta se utilizó para sofocar una revuelta de migrantes que protestaban su extenso período de detención. En agosto pasado, el servicio de migración estadunidense realizó una redada en Misisipi contra migrantes en una planta de alimentos.
El vocero Bryan Cox dijo “se usó brevemente una cantidad calculada de gas pimienta” durante la protesta del martes en la correccional Winn en Winnfield, una zona rural del estado. Unos 50 migrantes fueron rociados con gas pimienta y los manifestantes “luego hicieron caso”, añadió. Dijo que personal médico evaluó a los afectados y no se reportaron lesiones.
Familiares de detenidos en Winn dijeron que algunos migrantes habían rehusado regresar a sus celdas y estaban durmiendo afuera. Otros escribieron la palabra “Libertad” en sábanas y toallas.
Abogados dicen que solicitantes de asilo protestaron en otras cárceles de Migración en Luisiana, donde la población de migrantes detenidos ha subido en los últimos meses y llegó a 8 mil este año, la mayoría que pidieron asilo de Cuba y otros países dicen que han estado detenidos durante meses sin haber recibido una fecha de comparecencia en corte u oportunidad de salir tras pasar una evaluación inicial de asilo.
Un cubano de 43 años, Roylan Hernández Díaz, murió de presunto suicidio en octubre en otra cárcel de Luisiana, la correccional Richwood. Hernández había solicitado asilo en el cruce fronterizo de El Paso, Texas, fue calificado “inadmisible” por agentes fronterizos y fue puesto en detención por cinco meses.
“Los efectos psicológicos de estas situaciones son horrendas”, dijo Nathalia Dickson, abogada de inmigración con sede en Baton Rouge, Luisiana.
La situación dentro de la correccionalLos migrantes detenidos en una cárcel de migración al norte de Luisiana se negaron a mudarse a sus celdas, en lo que sus familias dijeron que es una protesta por su detención prolongada. El ICE informó el martes que había una protesta en curso en el Centro Correccional de Winn.
Winn tiene en detención hasta mil 500 personas y es una de las ocho cárceles en Louisiana que desde el año pasado comenzó a detener a migrantes.