INFONOR / EL TIEMPOLas niñas que fueron resguardadas por la autoridad habían viajado con un tío y un primo para vender artesanías y pedir dinero en la calle pues les cancelaron hasta las becas
Orillados por la situación precaria que viven las comunidades indígenas, la familia de las tres menores originarias de Chiapa resguardadas por PRONNIF llegó a la Ciudad para vender artesanías y pedir dinero en la calle, expresó Isidro Díaz Zantis, padre de una niña y tío de las otras dos.
Este viernes Díaz Zantis, partió a su tierra, Suyalho, municipio de Mintontic, Chiapas, pues las niñas le serán entregadas el próximo lunes en Tuxtla Gutiérrez por la Procuraduría de los Niños, Niñas y la Familia, luego que el Juez Penal, Hiradier Huerta Medrano, dictó libertad al detenido por presunción de trata de las menores.
Indicó que él, las menores y el joven que había sido detenido, quien es su sobrino, viajaron a la Ciudad aprovechando el "puente" del Día de Muertos para que las niñas obtuvieran su propio dinero para la escuela pues allá estudian y antes recibían beca del gobierno federal, pero desde hace un año la actual administración dejó de proporcionarlas.
"Tenían su oportunidad los niños, daban becas a primero, segundo, tercero hasta secundaria de mil 600 hasta 2 mil pesos, era las becas, pero ahorita el López Obrador todo nos quitó hasta a las madres de familia, lo quitó todo, había artesanías, todas las quitó, había muchos apoyos, pero ahorita ningún apoyo, llevamos un año y estamos esperando recibir, pero nada, puro engaño y de las Secretarías dicen que ya va a llegar apoyo y no ha llegado nada, por eso la gente salió a buscar apoyo", destacó.
Narró que el miércoles pasado detuvieron a su sobrino de 19 años y a las niñas las albergaron mientras que él desconocía lo que había pasado hasta horas después que pudo hablar con el sobrino y ver a las niñas en la casa-hogar Alba Moreira.
Un Juez Penal, negó al Ministerio Público la vinculación a proceso del joven acusado de presunta trata de personas o lo que resulte, basándose en que violaron sus derechos al detenerlo sin designarle un traductor de su dialecto, el tzotzil o tsotsil, que es una lengua maya, pues la persona habla poco español.
Pese a buscar en reiteradas ocasiones a la Subprocuradora de PRONNIF, Lizeth Partida Flores, para entrevista sobre la decisión del Juez, sólo respondió dos mensajes argumentando tener mucho trabajo que no podía dar ninguna declaración.
La familia indígena cultiva maíz y frijol para su sustento y vender un poco, siendo un ingreso mínimo sólo para sobrevivir por eso la gente busca salir unos días a ciudades al norte para obtener dinero de la población y, en esta ocasión, trajeron a las niñas para que sacaran para sus cuadernos, colores y libros.
De acuerdo al protocolo de la PRONNIF, establecieron contacto con la Procuraduría en el Estado de Chiapas para llevar a las menores bajo la responsabilidad de una persona comisionada de la dependencia que las entregará a sus padres.