Chivas no aprende la lección y vuelve a tropezar con la misma piedra. Tras remontar al inicio del segundo, es víctima de sus desatenciones defensivas, 2-4 marcador final a favor del Pachuca.
Los Tuzos, sin su mejor versión, doblan al Guadalajara en su casa. Tomás Boy se tambalea en las puertas del Clásico de Clásicos.
El Pachuca inició mejor en terreno tapatío. Chivas no hizo daño en la cabaña de Rodrigo Rey, así que poco a poco tomó más confianza con el correr de los minutos.
Rubens Sambueza, inteligente y pausado, se impuso con su experiencia en medio campo. En un abrir y cerrar de ojos, el argentino filtró a Franco Jara. El atacante corrió al espacio, y antes de enfilarse al arco, fue derribado por una barrida de Antonio Briseño.
Pese a que la acción fue apretada, el silbante decidió mantener su decisión y ni siquiera checar el VAR. Franco Jara lo convirtió en gol desde los 11 pasos. ¡Gol del Pachuca!
Aunque los Tuzos mostraron superioridad los primeros 45 minutos, el Rebaño empató los cartones gracias al vértigo de Alexis Vega.
Al segundo tiempo llegó mejor el Pachuca. Primero avisó con un disparo de Rubens Sambueza, sin problemas para Raúl Gudiño.
Sin embargo, Chivas tuvo capacidad de respuesta, y cuando nadie lo esperaba ni su propia gente, vacunó a Rey gracias a un remate de cabeza espectacular de Alan Pulido, a dentro de Javier López. ¡Gol de Chivas!
El panorama se despejó tras un primer tiempo gris. Sin embargo, el Rebaño volvió a flaquear en zona defensiva. Víctor Guzmán, ante una floja marca, se alzó entre dos rojiblancos para igualar de cabeza.
Alan Pulido tuvo dos claras que de haber capitalizado, pudieron sellar la victoria rojiblanca. Falló un mano a mano, y minutos más tarde, estrelló un cabezazo en el travesaño.
El Pachuca no perdonó. Los cambios de Palermo encajaron con Sambueza y exhibieron las carencias rojiblancas.
Jara robó un balón, se quitó a Sepúlveda y liquidó por abajo a Gudiño. Era del 2-3 de los Tuzos. Que no se conformaron y clavaron el cuarto por conducto de Edwin Cardona, ahora con la complacencia de Raúl Gudiño.
Chivas volvió a tropezar, el puesto de Boy se tambalea y anímicamente está golpeado de cara al Clásico Nacional.