INFONOR/EL TIEMPO
Desde el pasado 01 de julio, las mujeres embarazadas pueden ejercer de manera libre su derecho a gozar de 12 semanas de descanso por maternidad, es decir, se canceló la obligación de tomar seis semanas previas al parto y seis semanas después, con esto se calcula que el tiempo que la madre pasará con su hijo se incrementará en un 66 por ciento lo que beneficia al proceso de lactancia.
Así se establece en la Estrategia Nacional de Inclusión del Instituto Mexicano del Seguro Social que entró en vigor con el inicio del presente mes.
Para poder realizar la transferencia de semanas, las madres derechohabientes deberán contar con el consentimiento del patrón y con la autorización del médico del IMSS y los dos certificados de incapacidad que antes se exigían, ahora se reducen a uno por hasta 84 días que ampara los períodos prenatal y postnatal, simplificando el proceso para la asegurada.
Asimismo, las madres que decidan atender su parto fuera del IMSS sólo tendrán que presentarse una vez a la institución, dentro de la semana 34 de su embarazo, con la interpretación de un ultrasonido reciente, es decir, de una antigüedad menor a cinco semanas.
Con esta medida se beneficiará a alrededor de 75 mil aseguradas al año y liberará aproximadamente 400 mil consultas para el resto de la población derechohabiente.