El empresario Alonso Ancira Elizondo, quien tiene en México una orden de aprehensión por su presunta responsabilidad en operaciones con recursos de procedencia ilícita, negó la mañana de ayer ser un corrupto y aseguró que es un perseguido político, que si AMLO no quiere la planta de fertilizantes se la regrese.
Alonso Ancira, el empresario mexicano que fue detenido en España por probables delitos de operaciones con recursos de procedencia ilícita, cohecho y defraudación fiscal, el pasado mes de mayo, expresó su negativa a ser extraditado y aseguró que es inocente y "perseguido político" en México.
A casi un mes de su detención en el aeropuerto de Palma de Mallorca, y tras pagar una fianza de un millón de euros, el empresario reiteró en Madrid su inocencia ante un juez de la Audiencia Nacional española.
"No puedo hablar mucho más porque me dijeron que fuera cauto, la acusación que tengo no tiene fines jurídicos, tiene fines políticos y cuando la política entra por la puerta, la justicia sale por la ventana", declaró Ancira, luego de salir de su encuentro con las autoridades.
El empresario fue citado en punto de las diez de la mañana en el despacho del juez para una breve audiencia con el Juez Santiago Pedraz, quien le preguntó si quería ser extraditado.
Según las versiones oficiales, Ancira negó las acusaciones que pesan en su contra e insistió en enfrentar su juicio en Madrid, pues señaló que en estos momentos en México "se está persiguiendo a gente que fue detenida por problemas con la justicia, que no fue clara y transparente, pero está contaminando a otros que no".
Por otro lado, agregó que si el gobierno de AMLO está en contra de la operación de compraventa de las plantas de fertilizantes (a PEMEX), pues "que me las devuelvan".
"Que me las devuelvan. Si el señor (López Obrador) está en contra, que me las devuelvan. Esta es una transacción en donde participaron bancos internacionales, valuadores internacionales, no crea que están comprando naranjas, participaron yo diría que decenas de gentes, esto está comprobado y todo”, declaró.
Si el señor dice que valían 50 y yo tengo (documentos) que dicen que valía 600 y que me pagaron 270. ¿No las quiere? Que me las devuelva y que me dé tiempo para pagarle lo que dice que le metió", respondió durante la comparecencia.
Al negarse a la extradición en la audiencia a la que fue convocado, lo siguiente es que el caso se eleve a una vista de extradición en una fecha que aún está por definirse.
El tribunal, compuesto por tres magistrados, resolverá si se cumplen los requisitos para su entrega a México, aclararon fuentes jurídicas.
El empresario está sujeto a medidas cautelares: tiene que comparecer en el juzgado cada dos días, entregó su pasaporte y no puede salir de España.