Simpson, de 71 años, dijo que se siente saludable y feliz viviendo en Las Vegas. Y que ni él ni sus hijos quieren hablar mucho del 12 de junio de 1994, cuando su ex esposa Nicole Brown Simpson y su amigo Ronald Goldman fueron asesinados a puñaladas.
Después de 25 años de vivir a la sombra de uno de los asesinatos más notorios del país, O.J. Simpson dice que ingresó a una nueva etapa de su vida “sin cosas negativas”.
En una entrevista telefónica Simpson, de 71 años, dijo a la Associated Pressque se siente saludable y feliz viviendo en Las Vegas. Y que ni él ni sus hijos quieren hablar mucho del 12 de junio de 1994, cuando su ex esposa Nicole Brown Simpson y su amigo Ronald Goldman fueron asesinatos a puñaladas, tras lo cual Simpson pasó de ser un ídolo del fútbol americano a un sospechoso de asesinato.
“No queremos revivir el peor día de nuestras vidas”, expresó. “Mi familia y yo hemos dado vuelta la página y entrado en lo que llamamos una ‘zona sin cosas negativas’. Nos enfocamos en lo positivo”.
El dolor, no obstante, sigue presente en la familia de Goldman.
“El dolor no me sofoca”, dice su hermana Kim. “Pero cada momento especial de mis hijos, cada momento especial mío... no puedo compartirlos con mi hermano y pienso en todo lo que se ha perdido”.
Ron Goldman tenía 25 años y estaba devolviendo un par de anteojos de sol que la madre de Nicole Brown Simpson se había dejado en el restaurante donde él trabajaba cuando ambos fueron apuñalados decenas de veces.
El “Juicio del Siglo” de O.J. Simpson duró casi un año y resultó una obsesión nacional, con denuncias de racismo, de incompetencia policial, celebridades y violencia doméstica.