CIUDAD DE MÉXICO.- De la recolección en fosas de ocho mil 700 fragmentos de huesos humanos,algunos de ellos calcinados, la Fiscalía General del Estado aún no dictamina a quienes pertenecen, por lo que la incertidumbre persiste, dijo, María Isabel Cruz Bernal, dirigente del colectivo de "Sabuesas Guerreras".
Recordó que en la sindicatura de San Pedro, Navolato se dio el mayor hallazgo de restos de huesos calcinados, mismos que fueron clasificados en cinco mil 217 piezas; peritos de la Fiscalía General del Estado no tienen los dictámenes oficiales.
Cruz Bernal, quien cambió su residencia del estado de Oaxaca a esta ciudad en enero del 2017 al conocer que su hijo, el agente de la policía municipal de Culiacán Reyes Yosimar había sido levantado por un grupo armado, dice que su caso no avanza.
Apuntó que el hecho de que el estado de Sinaloa haya sido clasificado en el tercer lugar nacional, en cuanto a número de fosas descubiertas en el actual sexenio, es algo que debe alarmar puesto que el número de personas reportadas como desaparecidas va en aumento.
La presidenta del grupo de rastreadoras "Sabuesas Guerreras", manifestó que pese a que de manera periódica se tienen reuniones con la Comisión Nacional de Búsqueda y peritos de la Fiscalía Local, no se perciben avances en cuanto a las investigaciones de desaparecidos.
María Isabel comentó que recientemente el titular de la Fiscalía General del Estado, Juan José Ríos Estavillo, reveló que en este año se tienen contabilizados 113 cuerpos rescatados de fosas clandestinas, la mayoría de los ellos fueron descubiertos en el mes de marzo.
El nacimiento de nuevos colectivos de rastreadoras en el estado habla de la desesperación de las familias por encontrar a sus seres queridos aún si fueron sepultados de forma clandestina, puesto que no perciben voluntad de la autoridad.
Uno de esos nuevos grupos de búsqueda que surgió en el municipio de Guasave, recientemente descubrieron fosas clandestinas a un costado del bordo de un canal hidráulico, en la comunidad de Casa Blanca, de donde se sacaron 11 cuerpos.
Se conoce que los trabajos de genética forense, han permitido identificar hasta el momento a un total de cinco personas, dos de ellas, vecinos de la comunidad del Batamote, municipio de Guasave, sin que se tuviera reporte de su desaparición.