Uno de esos juegos de los que se puede platicar durante mucho tiempo y que se convierten en clásicos para el recuerdo Apenas un par de distracciones del pitcheo rival, solo eso, sirvieron para que los Venados de Mazatlán derrotaran por la mínima de 1-0 a los Yaquis de Ciudad Obregón. Con el resultado, los Venados tomaron ventaja de tres juegos a dos en la serie que habrá de reanudarse el martes venidero de regreso ya en Ciudad Obregón.
El de hoy fue choque de pelota todo dominado por el pitcheo, erigido como el gran protagonista del encuentro. Por un lado, el ganador Casey Harman (1-0) lanzando un juegazo por los Venados durante seis entradas y dos bateadores de la séptima en blanco, aceptando tres hits, regalando una base y ponchando a cinco. Por su parte, el derrotado Yoanner Negrín (0-1), labor de siete episodios completos de nueve hits, una carrera, sin regalar base y dos ponches recetados.
La solitaria anotación del juego llegó en la parte baja del quinto episodio que abrió Alex Liddi con doblete, siguió un “wildpitch” de Negrín con un out con el cual Liddi avanzó a tercera y ya con dos fuera, bateando Jeremías Pineda, nuevo lanzamiento descontrolado propició que el italiano llegara a la tierra prometida con la que sería la carrera del triunfo.
De mencionarse el gran relevo que ofreció Edgar Torres en la séptima tanda en la que tras que Harman aceptó sencillo de Anderson Hernández y regaló base a Víctor Mendoza, apareció Norman Elenes ante quien Jesús Valdez tocó la esférica para que sacaran out en tercera pero enseguida recetó golpe a Isaac Paredes, llenando las bases con solamente un tercio fuera. Vino a la loma el joven Edgar Torres. Que salió del problema ponchando al emergente Moisés Gutiérrez y dominando a José Juan Aguilar con elevado al jardín derecho. Brandon Cunniff apareció en el noveno rollo para sacar los tres últimos outs y llevarse su segundo salvamento en la serie.