Ciudad de México.– El Presidente Enrique Peña Nieto asegura, en el documento de su Sexto Informe de Gobierno, que la violencia en México “de ninguna manera (es) una crisis generalizada”, sino que se trata de un fenómeno focalizado en zonas específicas. También destaca que durante los primeros cuatro años de su administración federal se logró reducir los índices delictivos. Sin embargo, bajo su mandato, México ha alcanzado cifras históricas de homicidios, particularmente desde 2017 y 2018, pues mes con mes se han venido reportando alzas récord.
Las cifras de violencia rompieron una nueva marca en julio pasado, que se convirtió ya en el mes con más homicidios dolosos reportados en todo el país, al registrar 3 mil 17 víctimas, de acuerdo con datos del Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública (SESNSS). Además, un total de 18 mil 994 víctimas de homicidio doloso se acumularon en los primeros siete meses de este año.
Otro de los picos histórico se alcanzó en 2017, año que cerró como el más violento de la historia reciente del país, con 25 mil 316 asesinatos, según el propio Secretariado. Sin embargo, de acuerdo con el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi), en cifras preliminares se registraron 31 mil 174 homicidios en México en 2017; esto es equivalente a 25 homicidios por cada 100 mil habitantes y la mayor tasa en una década.
En el apartado “México en Paz”, el documento del Sexto Informe de Gobierno de Peña destaca:
“De ninguna manera se trata de una crisis generalizada; por el contrario, los hechos de violencia se encuentran focalizados en zonas específicas, algunos de estos relacionados estrechamente a los cruces fronterizos”.
El documento agrega que “si bien, durante los primeros cuatro años de Gobierno se logró reducir los índices delictivos, gracias a la coordinación interinstitucional y al uso de inteligencia, en los últimos dos años, dichos índices han recuperado los niveles del sexenio pasado. Lo anterior, tiene sus causas en cuestiones muy puntuales, principalmente en la evolución de la dinámica de la actividad delictiva”.
De acuerdo con los datos del SESNSP, las cifras de homicidio sólo tuvieron un descenso durante los primeros dos año de Gobierno de Peña Nieto. El primero al pasar de 21 mil 459 homicidios en 2012, a 18 mil 106 asesinatos en 2013, y a 15 mil 520, en 2014. A continuación las cifras sangrientas de cada año de este sexenio: